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lunes, 25 de marzo de 2013

"..."



4 comentarios:

  1. Bos días!!
    Desde luego, las vacas no han salido de la nada...
    Es una viñeta de Forges (de nuevo) muy inteligente, muy correcta!!.
    El niño pregunta.
    El abuelo se queda pensativo.
    Quizá... quizá ya lo haya olvidado!!
    Olvidar por el olvido, es lo que nos queda si continuamos despreciando y ninguneando el poder de la naturaleza y todos los seres vivos......
    Biquiños atlánticamente agarimosos!!

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  2. Vivíamos, Vaca, al otro lado del espejo, allí donde pacen, engendran y se divierten las vacas cósmicas. Allí donde Argos de los cien ojos guarda y cuida a la dulce Io y campea Hathor, con la luna entre los cuernos y el vientre henchido de estrellas. Ambas, ella y tú, resplandecéis entre los juncos iluminando la noche. Kamadhen, la florida, dormita en el establo de tu corazón y Audhumla se contonea calzada con tus pezuñas, haciendo germinar dioses de entre las piedras salinas. Y Aditi, vaca nutricia, madre del sol, la hermosa, se mira en ti y se complace.

    Y tú eres ellas.

    Y yo, corazón de corteza y picador aficionado, me atreví, Vaca, a devanar madejas de amor prohibido. Como un Zeus adolescente, soñé en dormir a tu grupa. Yo, que solo era un alcornoque.

    De la niebla emergió una goleta, Vaca. Cien bárbaros despeinados de sanguinaria mirada llegaron hasta la playa y con teas encendidas y grandísima alharaca subieron a nuestro prado.

    ¡Idos divinas, marchaos, corred hacia vuestras cuadras!

    A ti no te vieron, hermosa, ni tampoco a ellas: todo el amor del mundo os protegía.

    Y hoy soy mascarón de proa del navío solitario de aquel capitán pirata. En el fragor de la batalla te busco, Vaca, y acaricio el recuerdo del lugar exacto en que quedó tu última mirada.

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  3. UFFFFFFF... QUE PEREZA...
    QUE PEREZA...
    MEJOR FUMARSE ALGO MAS CONSISTENTE.

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  4. Ay... mis queridos y añorad@s Anónim@s..........
    Sinceramente no creí que la gente FUMARA tanto.
    Tanto o tan poco pero MALO.
    Antes de que mi santa compañera despierte y me agreda con improperios propios de su mal despertar, os diré algo: cuando se exterminen las vacas, entonces ya habrá que pensar en cambiar de planeta.
    ¡Disfrutad!

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