Akbar, el gran emperador mongol, dibujó una línea en la pared y le dijo a sus sabios que, sin tocarla, la hiceran más corta. Se quedaron perplejos y pensaron: ¡Eso es imposible!.
Entonces uno de sus sabios, Birbal, dibujó una línea más larga al lado de la otra, sin tocar la primera. Y al dibujar la línea más larga, la otra se volvió más corta.
Juan dijo, es como el poder de la mente, (que pocas veces utilizamos bien) pero tenemos el poder de decidir, como sentirnos, si ahora pequeñito, ahora grandioso, buen punto a recordar, me gusta la historia.
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